- Si juegas al tenis, el que gana paga las cervezas.
- Si está nublado, llueve, hace frío, hay atasco o… hace sol, silba al llegar al trabajo y, si no sabes, canta. Este mismo punto se aplica al llegar a casa.
- Sonríe a menudo; te hace sentir bien a ti y a los que te rodean y, además, es gratis. Si estás jodido, llora, suéltalo y luego… respira; como todo, pasará.
- No te avergüences de abrazar, besar o decir “te quiero”. Gritar, insultar, pelear… es lo que sí debería avergonzarnos.
- Cuando te enamores, no pongas límites. Ama sin medida.
- Cuando te enfades piensa, debate, defiende; pero sé consciente de que cada uno tiene una vida… y una verdad.
- Un amigo es un tesoro. Ama cada momento que compartes.
- Si no tienes algo bueno que decir de alguien, no hables de esa persona.
- No pierdas el contacto con quien te hace sentir bien. Quizás mañana sea tarde.
- Si puedes ayudar, hazlo.; no es necesario que nadie te vea.
- Enfócate en lo que te haga sentir bien. Lucha por lo que quieres mientras disfrutas de lo que tienes. Avanza admirando el camino.
- Sé tú mismo y no lo que crees que los demás quieren que seas.
- Si ves la luz, síguela. No fallarás y si te equivocas, aprenderás habiendo brillado. Atrévete, seguro que la experiencia vale la pena.
Y todo este decálogo de 13… mi decálogo, se reduce a un punto: “Sé y haz. Vive la vida que de verdad quieras vivir. Recuerda, solo tienes una… ¿o no?.
IMPORTANTE: Ahhhh y todo lo anterior sin olvidarte de: Tomar cinco piezas de fruta al día, beber un litro y medio de agua, andar una hora, lavarte los dientes tres veces, trabajar, hacer deporte, quedar con los amigos y dedicarle tiempo a tu pareja y familia… uffff (pero no olvides que, al final, puedes prescindir de lo que te parezca).
Gracias a todos los que habéis compartido mi vida hasta ahora porque es de vosotros de quienes he aprendido; y gracias a todos los que continuaréis y apareceréis en ella, porque me queda mucho por aprender.